Traspaso de mando

Lula presidente de Brasil: “Ganó la democracia”

Lula Da Silva asumió como presidente de Brasil por tercera vez. El flamante mandatario agradeció a quienes lo acompañan y disparó contra el gobierno de Bolsonaro: “el anterior gobierno fue un proyecto autoritario de poder” que se dedicó a difamar al exobrero y lider popular “a escalas industriales”, enfatizó.

“Prometo mantener, defender y cumplir la Constitución, observar las leyes, promover el bien general del pueblo brasileño, sustentar la unión, la integridad y la independencia de Brasil”, fueron las palabras con las que en nuevo presidente asumió su cargo.

Lula aseguró que se termina “el proceso de destrucción nacional” dejado por su antecesor Jair Bolsonaro, prometió realizar un gobierno de “reconstrucción” nacional y denunció el vaciamiento de las políticas públicas provocado durante la gestión del ultraderechista Bolsonaro.

Dijo también que pretende “construir la democracia” de su país “sobre bases sólidas” y anunció que se va a reunir con todos los gobernadores de los estados brasileños “para definir prioridades”, “estructurar un nuevo pacto para generar empleos” y “buscar recursos” para financiar estos cambios.

En tanto, el mandatario brasileño señaló que “fue fundamental el trabajo del tribunal superior de justicia” y aseguró que “quedó demostrado que un representante de la clase trabajadora puede dialogar por el beneficio de todos”. “Asumo el compromiso de construir un Brasil de todos y todas”, agregó.

“Fortalecer la democracia y defender la soberanía nacional serán pilares de nuestro gobierno”, adelantó el flamante mandatario. “El proceso electoral quedó marcado por el contraste: de la participación del pueblo al individualismo del gobierno saliente”, manifestó.

La ceremonia se desarrolla en medio de un fuerte operativo de seguridad con más de 12.000 hombres, francotiradores policiales y la prohibición del uso de armas de fuego para cualquier civil.

“Olé olé Olé Olá, Lula, Lula”, es el principal grito de los manifestantes, en su mayoría vestidos de rojo, el color del Partido de los Trabajadores, que hicieron las filas ante los puestos de control y cacheos que dan ingreso a la Explanada de los Ministerios y a la Plaza de los Tres Poderes, que conecta el Congreso, el Supremo Tribunal Federal y el Palacio del Planalto, la casa de gobierno.

Pese a la profunda polarización, amenazas y reclamos golpistas, el flamante presidente de Brasil realizó el tradicional desfile en el Rolls Royce negro descapotable de la Presidencia, como lo hizo los días 1 de enero de 2003 y en 2007 y que también utilizó en 2018 el ya expresidente Jair Bolsonaro.

Luego de jurar en el Congreso, Lula dio su primer discurso ante los diputados, senadores, representantes de las delegaciones internacionales y demás autoridades presentes.

Lula no recibió la banda presidencial por parte del saliente mandatario, quien abandonó el país el viernes con destino a Orlando, Estados Unidos, donde pasó el Año Nuevo con su familia en una casa en un barrio cerrado de un empresario y luchador de artes marciales mixtas.

Dentro del Planalto, el flamante presidente recibirá a las delegaciones extranjeras para un saludo protocolar y luego tomará juramento a los 37 ministros de su Gabinete.

Lula, su vice Geraldo Alckmin y sus respectivas esposas se dirigirán luego al Palacio de Itamaraty, donde se celebrará una recepción para los jefes de Estado y de Gobierno extranjeros presentes en Brasilia.

A la par de la ceremonia oficial se realizará el Festival del Futuro, una fiesta con más de 65 artistas en dos escenarios montados en la Explanada de los ministerios.

Mientras, frente al cuartel general del Ejército brasileño, bolsonaristas que reclaman un golpe de Estado militar para impedir la asunción de Lula permanecían este domingo en el lugar, pese a que Bolsonaro dejó el país y los jefes militares ingresaron en la transición de gobierno.