
El primer ministro de Portugal, Luís Montenegro, rebajó este jueves a 16 el número de muertos en el accidente de este miércoles en el funicular de Gloria, en el centro de Lisboa, en una declaración junto al alcalde de la ciudad, Carlos Moedas.
Montenegro agregó que, según los datos de que dispone, hay cinco heridos graves. No ofreció detalles sobre el total de lesionados, que anteriormente la Protección Civil señaló que son 23, de varias nacionalidades.
En tanto, la capital portuguesa está sumida en el duelo por la tragedia producida en la tarde del miércoles con el descarrilamiento de este funicular, uno de los más populares y más visitados por los turistas. El funicular quedó completamente aplastado contra un edificio en una curva.
El Gobierno portugués anunció que iniciará una investigación para aclarar lo sucedido tras decretar día de luto nacional para este jueves.
El accidente
Las imágenes del lugar mostraron el funicular amarillo, similar a un tranvía, destruido, que transportaba personas por una empinada ladera en la capital portuguesa. Los equipos de emergencia rescataban a la gente de entre los escombros.
La línea, inaugurada en 1885, conecta la zona centro de Lisboa, cerca de la Plaza de los Restauradores, con el Bairro Alto, famoso por su vibrante vida nocturna.
Es una de las tres líneas de funicular operadas por la empresa de transporte público municipal Carris y es utilizada tanto por turistas como por residentes locales.
Carris dijo en un comunicado que “se han llevado a cabo todos los protocolos de mantenimiento”, incluidos programas de mantenimiento mensuales y semanales e inspecciones diarias.
La línea Gloria transporta anualmente alrededor de 3 millones de personas, según el Ayuntamiento.
Sus dos vagones, cada uno con capacidad para transportar alrededor de 40 personas, están unidos a los extremos opuestos de un cable de arrastre con tracción proporcionada por motores eléctricos en los dos vagones.
El vagón al final de la fila aparentemente no sufrió daños, pero un video grabado por transeúntes y difundido por CNN Portugal lo mostró sacudiéndose violentamente cuando el otro descarriló, con varios pasajeros saltando por las ventanas y gente gritando.
El presidente Marcelo Rebelo de Sousa lamentó el trágico accidente en un comunicado, expresando la esperanza de que las autoridades establezcan pronto qué había causado el accidente.
Los investigadores policiales estaban inspeccionando el lugar y la fiscalía general dijo que abriría una investigación formal, como es habitual en los accidentes de transporte público.
“Es un día trágico para nuestra ciudad… Lisboa está de luto, es un incidente trágico, trágico”, dijo a la prensa Carlos Moedas, alcalde de la capital portuguesa.