Estados Unidos

Salman Rushdie, en estado crítico tras el atentado

Tras ser atacado a puñaladas en Nueva York, el escritor está con respiración asistida, tiene los nervios del brazo cortado, el hígado dañado y corre el riesgo de perder un ojo. Un hombre de 24 años fue identificado como el autor de la agresión, de la cual de desconocen sus motivos. Las sospechas por la “fatua” iraní.

El escritor británico de origen indio Salman Rushdie fue sometido a cirugía y se encuentra conectado a un respirador tras ser apuñalado en el cuello y el torso durante una conferencia en Nueva York, informó su agente literario.

“Las noticias no son buenas”, informó Andrew Wylie, el representante. “Salman probablemente perderá un ojo, le seccionaron los nervios de un brazo y recibió una puñalada en el hígado”, detalló.

El ataque se produjo cuando un hombre corrió hacia el escenario donde se encontraba Rushdie y se abalanzó sobre él.

Mientras el atacante era inmovilizado y detenido por la Policía, el escritor fue atendido por asistentes y las autoridades en el escenario. Posteriormente, Rushdie fue evacuado a un centro médico en helicóptero.

El principal sospechoso de atacar este viernes al autor de “Los versos satanicos” fue acusado de intento de asesinato en segundo grado y agresión, como informó este sábado el fiscal del distrito del condado neoyorquino de Chautauqua, Jason Schmidt.

“El individuo responsable del ataque de ayer, Hadi Mattar, ha sido acusado formalmente. Anoche fue procesado por estos cargos y quedó en prisión preventiva sin fianza”, confirmó Schmidt.

Irán y la fatua

A raíz de su libro ‘Los versos satánicos’, publicado en 1988, Rushdie fue tachado de blasfemo y la obra fue prohibida en Irán.

La novela provocó una gran polémica en el mundo musulmán, debido a la supuesta irreverencia con que se trata a la figura del profeta Mahoma.

Rushdie lleva tres décadas como objeto de una “fatua” que insta a ejecutarlo, emitida por el ayatolá Ruhollah Jomeini, el entonces líder religioso de Irán.

El edicto religioso no es vinculante de acuerdo a la doctrina islámica, pero fue acompañado por una “recompensa” a quien lograse asesinar al escritor.

Tras la emisión del decreto de Jomeini, el escritor vivió en la clandestinidad durante una década.

Otras personas asociadas a la obra literaria sufrieron ataques: Hitoshi Igarashi, el traductor al japonés de la obra de Rushdie, fue asesinado a puñaladas fuera de su casa.

Ettore Capriolo, traductor al italiano, sobrevivió a un ataque en su apartamento en Milán, mientras que al editor de la novela en Noruega le dispararon en una calle de Oslo.

El texto todavía está prohibido en India, donde nació Rushdie, y en una larga lista de países musulmanes, aunque Iran desestimó hace tiempo sostener la amenaza que el clérigo realizó hace 34 años.

De todos modo se desconoce si Mattar, nacido años después del edicto, actuó en consecuencia.

El joven agresor se negó a explicarse frente a las autoridades, y no respondió al interrogatorio.