River le ganó 1-0 a Racing por la inexorable Ley del ex que Maxi Salas aplicó en el Gigante de Arroyito de Rosario Central para darle a su equipo la clasificación a las semifinales de la Copa Argentina tras un clásico intenso en el primer tiempo y caliente en el segundo.
El “Muñeco” Marcelo Gallardo se inclinó por Facundo Colidio por sobre Ignacio Fernández y la decisión dio rápidos resultados porque el delantero asistió al goleador del partido a los 5 minutos de juego en un ataque directo que tomó mal parada a la defensa de Racing.
Los amantes del morbo tuvieron lo que buscaban en la tarde rosarina. El Matador apareció llamativamente solo por el medio del área y abrió el marcador con un disparo alejado de la mano de Facundo Cambeses.
Con ese golpe tempranero, el Millonario le cedió la pelota a la Academia. Y entonces la manejó el equipo de Gustavo Costas. Por momentos pisó el área de Franco Armani y tuvo dos jugadas de la mano del goleador Adrián Martínez, pero el Pulpo ganó los duelos.
Sucedió que, como los de Avellaneda se adelantaron para intentar penetrar la defensa riverplatense, quedaron desguarnecidos en el fondo en más de una oportunidad, y Colidio lo aprovechó. Juan Fernando Quintero pudo hallarlo alguna que otra vez por izquierda y el ex Tigre ensayó dos peligrosos remates, que estuvieron cerca de vencer por segunda vez la valla del ex golero de Banfield.
Conforme fueron pasando los minutos, Racing mermó en su búsqueda por generarle problemas al fondo del equipo de Gallardo. Los de Costas fueron dueños de la pelota, pero cada vez con menos profundidad y claridad. Santiago Sosa jugó decididamente de ‘cinco’ y se encontró con éxito con Agustín Almendra.
Sin embargo, antes de que terminara la primera parte, la Academia volvió a la carga y buscó por afuera. Con Gabriel Rojas y Facundo Mura, a las espaldas de Gonzalo Montiel y Marcos Acuña, intentó con centros que no terminaron siendo efectivos. “Maravilla” tuvo otras chances, pero no lo rodearon y acabó perdiendo ante las presiones de Lucas Martínez Quarta -sobre todo- y Lautaro Rivero.
El complemento tuvo un inicio similar al final del primer tiempo. Con más ímpetu que juego asociado, los conducidos por Costas se le fueron al humo a un Millonario replegado que defendió los ataques aéreos. Pero en el momento de mayor empuje albiceleste, en la tribuna de los de Avellaneda encendieron bengalas que provocaron que el árbitro Hernán Mastrángelo parara el partido unos minutos.
La poca creatividad de Racing le hizo sentir a River que debía adelantarse. Con algún contraataque y centros desde los costados, pusieron incómodos al fondo académico, al que se sumó Rojo, quien reemplazó a Colombo y tuvo que soportar las pullas del público de Núñez, las mismas que sufrió Salas por parte de los simpatizantes racinguistas.
El tramo final, si bien tuvo algo de suspenso, fue favorable a los de Gallardo, porque el goleador Martínez vio la segunda tarjeta amarilla por un manotazo sobre un rival y se fue expulsado. Entonces, el público millonario se dedicó a disfrutar los minutos finales ante el casi nulo peso ofensivo de Racing.
En semifinales se vendrá Independiente Rivadavia, con sede, fecha y horario a confirmar. Por lo pronto, River tendrá que medirse con Rosario Central el próximo domingo, a las 21.15, en este mismo escenario. El equipo de Costas recibirá precisamente a los mendocinos en Avellaneda el lunes a las nueve de la noche por la undécima fecha del Torneo Clausura.
Con información de DeporTV