El pasado domingo 5 de junio, Daiana Abregú fue hallada muerta en un calabozo de la Estación de Policía Comunal de Laprida, ubicada en Pellegrini 1480 de dicha localidad bonaerense.
La joven de 26 años y madre de un niño había sido demorada por una contravención. La versión policial dijo que Daiana “causó disturbios en la calle”.Fue trasladada a la Estación Comunal, y se la encerró en un calabozo. Siete horas después, un subinspector la encontró ahorcada con su campera.
Finalmente, luego de que la policía intentara instalar la versión de un suicidio, la autopsia efectuada sobre el cuerpo de Abregú confirmo que la mujer murió producto de “asfixia mecánica”. Por eso, su familia y defensores de los derechos humanos afirman que se trata de un caso de violencia institucional.
Esa hipótesis se vio reforzada por una nota de voz de WhatsApp grabada por una niña, hija de un médico del hospital zonal, que hecha por tierra la versión policial y ofrece una explicación de la mecánica de la muerte de Abregú.
“Papá trabaja en el hospital, y lo que le informó el jefe es que Daiana no se ahorcó, no murió ahorcada, sino que la asfixiaron con una bolsa en la cabeza. Se dice que a la gente que está alterada o algo le ponen una bolsa en la cabeza para tranquilizarla y acá se pasaron de vuelta y la mataron”, reza el mensaje de la niña de 11 años, hija de un médico del hospital Pedro Sancholuz de la pequeña ciudad.
El audio, que estaba dirigido a una amiga de la niña, está en poder de José Ignacio Calonge, titular de la Fiscalía de Delitos Especiales del Departamento Judicial de Azul. La madre de la menor que recibió ese mensaje se presentó a declarar y entregó el celular.
Por su parte, el doctor Omar René Baquini, padre de la niña autora del audio y empleado del hospital al que fue enviado el cuerpo de Daiana, debía declarar como testigo. Pero la citación fue cancelada a último momento.
Finalmente, el fiscal evaluará si le tomará declaración testimonial o indagatoria a los cuatro policías implicados en la causa, quienes fueron allanados pero no están imputados en la causa, solo sumariados por Asuntos Internos.
Uno de ellos es un policía que estaba a cargo de la vigilancia de los calabozos y los restantes son tres agentes mujeres que estaban en la dependencia al momento del hecho.
Tras la muerte de Abregu en la Comisaría de Laprida, este último viernes se removió a toda la cúpula policial de ese partido bonaerense.