Miguel Ángel Russo dejó de ser el entrenador de Rosario Central: decidió alejarse de su cargo por motivos personales y se despidió del plantel luego de una charla con los directivos.

“Uno con dolor entiende que este es el momento para dar un paso al costado, es lo mejor para el club”, explicó en un mensaje para los hinchas.

El experimentado director técnico del Canalla, de 68 años, no había estado al frente de la última práctica del equipo, que ahora quedó en manos de Matías Lequi (DT de la Reserva) de forma interina, de cara al encuentro ante Gimnasia el lunes y al clásico contra Newell’s en el Gigante de Arroyito, el 10 de agosto.

Miguel Ángel Russo dejó de ser entrenador de Rosario Central

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Russo -uno de los máximos referentes de la historia de la institución- había asumido en Central en diciembre de 2022, con el triunfo de Gonzalo Belloso como presidente en las elecciones. En su quinto ciclo en el club, levantó al equipo -que en ese entonces estaba mirando de reojo la lucha por la permanencia en la máxima categoría- y lo llevó a ser campeón de la Copa de la Liga Profesional 2023 (se impusó a Platense en la final en Santiago del Estero).

El entrenador había mantenido una reunión con los directivos este jueves para discutir sobre el mercado de pases, pero finalmente decidió dar un paso al costado en su cargo. Todo, en medio del hermetismo sobre su estado de salud después de haber superado un cáncer de próstata que le habían diagnosticado en 2017.

Matías Lequi asume temporalmente como DT

Tras la salida de Miguel Ángel Russo, el Flaco se hace cargo del plantel profesional.

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Russo dirigió a Central en cinco ciclos (1997-1998, 2002-2004, 2009, 2012-2014 y 2022-2024), en 301 partidos. Más allá de que le tocó disputar torneos internacionales, se caracterizó por asumir casi siempre ante escenarios desfavorables: fue bombero para salvar el equipo del descenso (en la promoción contra Belgrano en 2009) y también fue el DT que devolvió al Canalla a Primera en 2013 después de tres años en la B Nacional.

A su vez, su increíble racha en los clásicos lo convirtieron en un ídolo de la institución: fueron siete victorias y cinco empates (incluyendo el histórico triunfo por 4-0 en el Apertura de 1997, encuentro que no terminó porque Newell’s se quedó con 6 jugadores en campo).

Le faltaba conquistar un título con Rosario Central, algo que logró con la coronación en la Copa de la Liga Profesional 2023: ese triunfo por 1-0 frente a Platense en la final en Santiago del Estero lo inmortalizó como uno de los próceres del club rosarino.