El rosarino Messi llegó a la fiesta a las 21:50 vestido con una remera blanca, al volante de un automóvil Audi Q8 gris, junto a su esposa, Antonela Roccuzzo, quien lucía un vestido plateado.
En la fiesta también participaban la familia de Messi: su madre, Celia Cuccittini, y sus hermanos Rodrigo y María Sol, quienes llegaron en otros dos autos.
Luego de ellos también ingresó al salón de eventos el exvolante de Newell’s y la selección nacional Maximiliano Rodríguez.
Messi alquiló el Centro de Convenciones en un festejo cerrado y vedado a la prensa, al extremo que el edificio del Casino fue cercado con una doble valla desde el mediodía y hasta cerraron su acceso principal, que da sobre el boulevard Oroño, frente a la autopista Rosario-Buenos Aires.
Algunos jugadores de la selección argentina llegaron a Rosario en tres colectivos destinados especialmente para ellos y participaban del festejo junto a sus parejas y familiares más cercanos. Se encontraba Ángel Di María y el bonaerense Leandro Paredes, quien había llegado al mediodía a esta ciudad.
La fiesta era animada por el grupo La Mosca, autor del clásico tema “Muchachos”, y por Los Palmeras, el elenco que tocó en el casamiento de Messi y Antonela Roccuzzo y que también se había celebrado en este espacio.
Numerosos hinchas de la selección enfundados en camisetas argentinas, de Rosario Central y Newell’s Old Boys se agolparon esta tarde frente al ingreso a la fiesta, sobre la calle Moreno, y observaron detrás de las vallas metálicas el ingreso de los invitados, quienes eran recibidos por empleados de seguridad vestidos con una remera negra con una inscripción en la espalda: “Campeones del Mundo”.