Los Pumas se quedaron con un partido dramático, que quedará grabado en las retinas de los amantes del rugby por mucho tiempo. Al final de un duelo repleto de tensión vencieron por 29 a 17 a Gales, por los cuartos de final del Mundial de Francia, y el próximo viernes jugarán una de las semifinales del torneo.
El seleccionado argentino y Gales protagonizaron una dura pulseada desde el inicio en el estadio Vélodrome de Marsella y la incertidumbre en torno al resultado se mantuvo firme hasta los últimos instantes.
De este modo Argentina se metió en semifinales del Mundial por tercera vez en su historia.
Argentina tuvo la primera chance de abrir el marcador tras un penal, pero Emiliano Boffelli no pudo convertir y fueron los británicos los que a los 14 minutos llegaron a su primer try con Dan Biggar, quien además puso la pelota entre los tres palos.
Luego, una insólita situación ocurrió a los 15 minutos cuando el árbitro Jaco Peyper debió ser reemplazado por un choque con Julián Montoya que lo dejó lesionado y en su lugar ingresó Karl Dickson. A los 21 minutos Gales se imponía por 10, pero con dos penales convertidos, Los Pumas achicaban la distancia y se iban al entretiempo 10 a 6.
Ya en la segunda mitad, los dirigidos por Michael Cheika lo dieron vuelta y cuando se imponían con una diferencia de 2 puntos, Gales volvió a estar arriba al convertir un try por descuido de Los Pumas.
Los Pumas no dejaron de intentar y a los 27 minutos, luego de varios penales, consiguieron un agónico try para ponerse 19 a 17 y aunque siete minutos después su rival tuvo la gran chance de volver a estar arriba, Matías Moroni metió un tackle salvador.
Finalmente, Nicolás Sánchez, que ingresó en los últimos minutos, puso su try para la victoria de la Selección nacional y en el último minuto una conversión a los tres palos para sellar el pase a semifinales.