
Lucero Kuhn crecio en Bovril, Entre Rios, entre cultivos y animales. Su padre le enseñó las labores diarias del establecimiento y su abuelo le transmitio la militancia gremial que hoy la vincula a las juventudes de la Federacion Agraria Argentina (FAA).
“La vida en el campo es linda”, afirma Lucero con una sonrisa, y esa conviccion la impulso a estudiar ingenieria agronomica en la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y a promover una iniciativa que busca facilitar el arraigo juvenil mediante viviendas rurales adaptadas a la actividad agropecuaria.
Una crisis de larga data
Argentina enfrenta hace decadas el desafio del envejecimiento rural y la migracion juvenil hacia centros urbanos.
Las explotaciones familiares constituyen una parte esencial del sistema productivo; esas unidades dependen de la sucesion generacional para mantener la produccion, conservar el territorio y sostener economias locales. Cuando los jovenes abandonan el campo, productores venden tierras, se reducen inversiones y desaparecen actividades de escala familiar que aportan diversidad productiva.
Muchos jóvenes nacidos y criados en el campo se ven obligados a buscar otros horizontes debido a la falta de infraestructura, servicios básicos y oportunidades para desarrollarse en su lugar de origen.
La carencia de una vivienda propia y de condiciones adecuadas para vivir y trabajar dificulta que las nuevas generaciones puedan independizarse y darle continuidad a la actividad agropecuaria.
“Queremos fomentar el arraigo, que los jovenes puedan seguir haciendo el trabajo que hacen aca con sus familias y no tengan que emigrar a las grandes ciudades”, dijo Kuhn.
El proyecto aun se encuentra en fases iniciales, pero ya abrio el debate sobre como integrar politicas de vivienda con la sostenibilidad productiva y la renovacion generacional en el sector agropecuario.
Referentes como Lucero, destacan que contar con una vivienda digna, junto a servicios esenciales e infraestructura, es clave para que quienes apuestan por el campo puedan construir un futuro sin tener que irse.
El principal objetivo de la ley es proveer un mecanismo de acceso a la vivienda que permita a los jóvenes y familias rurales (pequeños y medianos productores) construir o adquirir una casa en el mismo predio donde desarrollan su actividad productiva, o en cercanías.
El proyecto busca crear herramientas de financiamiento y gestión que sean específicas para el entorno rural, diferenciándose de los planes de vivienda urbana. Se espera, por ejemplo, que tenga en cuenta las características agroecológicas y productivas de cada región del país.