Cultura

La escritora Magalí Etchebarne es finalista del Premio Ribera del Duero de Narrativa Breve

Con el libro de cuentos “La madre, el trabajo, la muerte, el amor”, la argentina competirá con la peruana Katya Adaui, la mexicana Dahlia de la Cerda, la española Nuria Labari y la uruguaya Fernanda Trías. La ganadora de los 25.000 € se conocerá el 20 de marzo.

La escritora Magalí Etchebarne es finalista del Premio Ribera del Duero de Narrativa Breve

La ganadora del premio será publicada en la Colección Voces/Literatura de la editorial Páginas de Espuma, recibirá una escultura y 25.000 €.

La editorial informó que este año se postularon 1135 manuscritos que suponen un incremento de casi el 18 por ciento respecto a la edición anterior, cuya ganadora fue la narradora boliviana Liliana Colanzi con su libro “Ustedes brillan en lo oscuro”.

El Premio Ribera del Duero de Narrativa Breve, que promueve esta denominación de origen vinícola española junto a la editorial Páginas de Espuma, se ha consolidado como el gran referente para los autores de la narrativa breve en español y ha impulsado las trayectorias de autores hoy reconocidos como la argentina Samanta Schweblin y la mexicana Guadalupe Nettel.

Etchebarne tuvo un auspiciante debut en 2017 con “Los mejores días”, un libro de relatos publicado por el sello independiente Tenemos las máquinas que se convirtió en fenómeno por la fuerza de sus pequeñas tramas que registran distintas gradaciones de los vínculos: inseguridades, deseos y desgarros que irrumpen en historias donde la naturaleza tiene una presencia recurrente.

En 2023 la autora publicó el poemario “Cómo cocinar un lobo”, una obra signada por el duelo ante la muerte de sus padres.

Con su nuevo e inédito libro, Etchebarne compite ahora con “Un nombre para tu isla”, de la peruana Katya Adaui; “Medea me ayudó a abortar” de la mexicana Dahlia de la Cerda, “No se van a ordenar solas las cosas”, dela española Nuria Labari; y “Una mujer de su época”, de la uruguaya residente en Colombia Fernanda Trías.

En el anuncio de las finalistas, los organizadores del premio destacaron la diversidad geográfica y la calidad de los manuscritos, reflejando así la vocación internacional de un premio que nunca antes había albergado tanta participación.

En total, se recibieron trabajos de 38 países, mayoritariamente de procedencia hispanoparlante como España, Chile, Bolivia, México, Colombia y Argentina, aunque también hubo postulaciones de Francia, Italia, Bélgica o Canadá.

Además, la repercusión de este certamen también se ha hecho sentir en países con ganadores o finalistas de ediciones anteriores, destacando el crecimiento de inscripciones en Bolivia y Chile.

En cuanto a la modalidad de presentación de las candidaturas, recibidas tanto por email como en papel, así como el número de participación de mujeres escritoras, se mantienen muy similares a años anteriores.