Todo tiene un porqué

Entre Ríos

Entre Ríos está rodeada de ríos caudalosos, atravesada por cursos más sutiles, arroyos y hasta brotada por manantiales termales. Recibe este nombre porque sus límites están conformados por el río Paraná, al oeste y sur, y el río Uruguay, al este.

Fue la primera provincia del país en la cual se creó una colonia agrícola, en 1853. Cinco años más tarde, se fundó la “Asociación Panadería del Pueblo”, la primera cooperativa registrada en todo el territorio nacional.

Suizos, austríacos, rusos, alemanes, rumanos y polacos se establecieron, en el siglo XIX, en distintas regiones de Entre Ríos, para trabajar en otras colonias. Se destacó el ingreso de más de 20 mil judíos de Europa del este, cuyo trabajo en el campo permitió que se los reconociera como “los gauchos judíos”, título del libro de uno de aquellos inmigrantes, Alberto Gerchunoff, quien desarrolló una importante obra narrativa. Otro autor relevante de la provincia, para muchos el más grande poeta que ha dado el país, es Juan L. Ortiz.

En Entre Ríos, a su vez, desde hace 150 años, se celebran algunos de los carnavales más importantes del mundo, como el de Gualeguaychú, un verdadero suceso cultural, turístico y social. “El Carnaval es una fiesta que, a decir verdad, nadie le ha otorgado al pueblo, sino que el pueblo se dio a sí mismo”, afirmó Goethe en su libro Viaje por Italia, después de haber presenciado el Carnaval de Roma en 1878. Esta definición se aplica perfectamente a la manera en que en Entre Ríos se vive el carnaval.

Nos visitaron Raquel Bressan, doctora en Ciencias Sociales y Alicia Martin, doctora en antropología.