La Corte Suprema de Justicia de la Nación comenzó a publicar en 2015 informes estadísticos de las causas judiciales en las que se investigan muertes violentas de mujeres cis, mujeres trans y travestis por razones de género.
Además, el poder judicial construye un Registro Nacional de Femicidios compuesto por un informe anual de las causas judiciales iniciadas por año donde se investiga un femicidio, los informes del Observatorio de seguimiento de las causas y sentencias de femicidio de dicho año.
Con esta información es posible realizar un seguimiento durante todo el proceso judicial de cada femicidio. Quedan por fuera los casos donde el victimario se suicidó luego del hecho, y no se inició la causa judicial.
Por otro lado, las organizaciones feministas (como por ejemplo La Casa del Encuentro, Ahora que Así Nos Ven, Mumalá y el Observatorio Lucía Pérez) continúan publicando estadísticas mensuales elaboradas a partir de las publicaciones periodísticas.
Los datos
En 2021 ocurrieron un total de 251 femicidios, entre ellos 20 vinculados y 5 trans-travesticidios, lo que promedia un crimen con motivos de género cada 35 horas y representa un 13% menos a la cantidad de casos registrados en el 2020.
Si se tiene en cuenta la modalidad del hecho, el 31% de las mujeres fueron asesinadas mediante el uso de armas blancas, el 25% como consecuencia de la utilización de armas de fuego, mientras que el 24% por la fuerza física de su agresor.
Por otro lado, la estadística de la CSJN destaca que 182 de los 231 femicidios directos se dieron en contexto de violencia doméstica, 20 casos tuvieron lugar en una situación de violencia sexual o de trata de personas, mientras que 3 casos sucedieron en un contexto de discriminación por orientación sexual o de identidad de género.
Dentro de las características principales de las 231 mujeres asesinadas, en lo que refiere al rango etario, 179 tenían entre 18 y 59 años, 32 tenían más de 60 años, mientras que 19 tenían menos de 17 años. Esto evidenció un promedio de edad de 37 años.
En lo que refiere a la interseccionalidad de las víctimas, 12 mujeres asesinadas por femicidio eran migrantes, 7 se encontraban ejerciendo la prostitución, 6 estaban embarazadas, 5 vivían en situación de calle y 4 tenían una discapacidad.
Con relación a los hechos previos de violencia de género, al menos 42 víctimas directas de femicidio habían efectuado denuncias formales contra sus agresores, a la vez que en 81 vínculos se relevaron hechos previos de violencia que surgieron por otros medios a partir de la revisión de las causas judiciales, pero que no habían sido denunciados formalmente.
Los femicidios vinculados son 20, se definen como ”aquellos homicidios cometidos contra una o varias personas, independientemente de su género, a fin de causarle sufrimiento a una mujer cis o a una mujer trans/travesti en un contexto de violencia de género”. De ese total, la mitad (10 casos) de los asesinatos fueron contra los hijos o hijas de la persona a la que se quería violentar.
Otro dato que destaca el informe es que 25 de los imputados formaban parte de una fuerza de seguridad, de los cuales 13 utilizaron sus armas reglamentarias para cometer el hecho.
La tasa de víctimas directas de femicidio por provincia indican que en Chaco (2,43), Santiago del Estero (2,22) y Tucumán (2,07) se registraron los mayores índices.
Si sos víctima o conocés a alguien que sufra violencia de género llamá al 144 las 24 horas.