Internacional

El Papa reforma el Código de Derecho Canónico para endurecer el delito de pedofilia

El papa Francisco decidió reformar el Código de Derecho Canónico e introdujo un artículo que contempla la pedofilia y específicamente los delitos de abusos contra menores cometidos por sacerdotes, una medida exigida por las víctimas y que endurece los castigos.

El delito contra menores queda tipificado en la nueva versión del Código en un canon específico, según anunció este martes el Vaticano.

Se trata de un paso más en la batalla del pontífice argentino Jorge Bergoglio contra los abusos sexuales de menores dentro de la Iglesia, un fenómeno que ha estado por décadas encubierto por la institución.

Según la reforma del Código de Derecho Canónico anunciada por el Vaticano, se amplían los periodos de prescripción y se indemniza a las víctimas.

El papa Francisco quiso revisar la disciplina penal con el fin de agilizar y endurecer las penas contra los sacerdotes que abusan sexualmente de menores y llegar a erradicar la pederastia que sacude desde hace décadas a la Iglesia católica.

“Para responder adecuadamente a las exigencias de la Iglesia en todo el mundo – explica el Papa Francisco – resultaba evidente la necesidad de revisar también la disciplina penal promulgada por San Juan Pablo II, el 25 de enero de 1983, con el Código de Derecho Canónico. Era necesario modificarla de modo que permitiera su empleo a los Pastores como ágil instrumento saludable y correctivo, y que pudiese ser usado a tiempo y con caridad pastoral, a fin de prevenir males mayores y de sanar las heridas causadas por la debilidad humana”, declaró el Pontífice esta mañana

El Papa recordó que su antecesor Benedicto XVI fue quien puso en marcha esta revisión en 2007, comprometiendo “con espíritu de colegialidad y de colaboración” a expertos en Derecho Canónico de todo el mundo, a las Conferencias Episcopales, a los Superiores Mayores de los institutos religiosos y a los Dicasterios de la Curia Romana. Un trabajo intenso y complejo, que fue transmitido a Francisco en febrero de 2020.

Los diferentes posibles delitos cometidos contra menores por parte de sacerdotes serán considerados en la sección titulada “Delitos contra la vida, la dignidad y la libertad humana” y se incluirá entre ellos “el delito contra el sexto mandamiento del Decálogo con un menor o una persona habitualmente afectada por el uso imperfecto de la razón o con una persona a quien la ley reconoce una protección similar”.

Según el arzobispo Filippo Iannone, presidente del Pontificio Consejo de Textos Legislativos, se han introducido nuevas penas, entre ellas la reparación, el resarcimiento del daño y la privación de toda o de una parte de la remuneración eclesiástica.

La medida cubre también a los laicos con tareas eclesiales, para los cuales la prescripción del delito pasa de 5 a 7 años, mientras que para los clérigos llega a 20 años.

La reforma cambia el 80% de los 89 artículos sobre las penas y reduce la llamada “discrecionalidad” que se dejaba a obispos y superiores religiosos, lo que generaba mucha negligencia y alimentaba el encubrimiento.

En nuevo código entrará en vigor el 8 de diciembre y aborda también otros delitos, entre ellos el de corrupción.