Según trascendió, el magistrado fundamentó su decisión en la “falta de legitimación procesal” de los particulares damnificados para solicitar una medida de esta naturaleza. Esta resolución implica que Makintach continuará el proceso en libertad, aunque se le impuso una prohibición de mantener contacto con los testigos del expediente.
El abogado Rodolfo Baqué, quien representa a otra de las partes, reveló ser el único que se opuso públicamente a la detención, argumentando una cuestión de coherencia profesional en su defensa de la libertad durante el proceso penal. La defensa de Makintach podría presentar en las próximas horas una aclaratoria sobre los alcances de la prohibición de contacto con testigos.