América Latina

Atentado contra un candidato en Colombia: buscan a los autores intelectuales

El candidato Miguel Uribe Turbay fue víctima de un atentado durante un acto de campaña, cuando un sicario le disparó tres veces en la cabeza. El político opositor, de 39 años, está en cuidados intensivos “para garantizar su estabilización postoperatoria”. Su estado reviste la máxima gravedad y el pronóstico es reservado. Ahora, la investigación se centra en determinar quienes dieron la orden.

Atentado contra un candidato en Colombia: buscan a los autores intelectuales

Colombia busca con más de 100 investigadores de la policía a los autores intelectuales de un atentado a tiros contra el aspirante a la presidencia Miguel Uribe, sometido a una cirugía tras ser gravemente herido.

En medio de un acto público en un barrio popular de Bogotá el sábado, el senador de 39 años recibió tres impactos de bala, de acuerdo con los paramédicos que lo atendieron.

Llegó a una clínica moribundo y en la madrugada de este domingo salió del quirófano. El alcalde de la capital, Carlos Fernando Galán, aseguró que atraviesa “horas críticas” de recuperación para garantizar su supervivencia.

El centro médico que lo atiende sostuvo en un comunicado que Uribe “está en cuidados intensivos para garantizar su estabilización postoperatoria”, y que su “estado reviste la máxima gravedad y el pronóstico es reservado”.

Quién es Uribe Turbay

Miembro del partido de derecha Centro Democrático, Uribe Turbay lanzó su candidatura presidencial en marzo.

El senador, de solo 39 años era una destacada voz de la oposición al gobierno del presidente Gustavo Petro, el primer político de izquierda en llegar a la presidencia de Colombia. Petro no podrá buscar la reelección en 2026.

Uribe Turbay nació en una prominente familia política. Es nieto del expresidente Julio César Turbay Ayala, quien ejerció el cargo entre 1978 y 1982, y nieto paterno de Rodrigo Uribe Echavarría, exdirector del Partido Liberal.

Su familia también sufrió violencia política: su madre, la periodista Diana Turbay, fue secuestrada en 1990 por el cartel de Medellín, dirigido por Pablo Escobar, y murió un año después en un intento de rescate.

En octubre del año pasado, el dirigente publicó un video en redes sociales anunciando su intención de presentarse a la presidencia, eligiendo las montañas de Copacabana, en el departamento de Antioquia, como escenario.

No era el favorito para las elecciones del próximo año, según encuestas recientes, y aún enfrentaba competencia dentro de su coalición política.

En sus mensajes de precampaña, Uribe Turbay se centró principalmente en la seguridad, buscando impulsar la inversión y promover la estabilidad económica.

Un sicario menor de edad y un cerebro desconocido

Un adolescente de 15 años fue capturado como sospechoso del atentado, pero se ignora quiénes fueron los autores intelectuales del ataque. No se conocían públicamente amenazas contra Uribe, un fuerte crítico de la izquierda y las guerrillas y narcotraficantes que operan en el país.

El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, sostuvo este domingo que el menor fue “instrumentalizado” por “criminales” para llevar a cabo el ataque. El presidente colombiano Gustavo Petro pidió el sábado una investigación exhaustiva que empiece por los escoltas de Uribe, pues “todas las hipótesis están abiertas”.

Investigación a fondo

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, afirmó que su Gobierno no escatimará esfuerzos para descubrir a quienes ordenaron el atentado en el que fue gravemente herido Uribe Turbay, y no descartó que su escolta haya fallado al protegerlo. “Es un día de dolor”, empezó diciendo Petro.

“Todos los protocolos de investigación al máximo nivel, con la más alta calidad profesional, trabajando en equipo entre todas las agencias de inteligencia, se tienen que concentrar a partir de ahora en descubrir quién es el asesino intelectual”, manifestó Petro en una alocución al país en la que estuvo rodeado de autoridades policiales y militares de Colombia.

“La verdad es aquí esencial. He ordenado que se investigue a la misma escolta”, dijo Petro, quien consideró que “siempre que un asesino puede actuar sobre una persona protegida, previamente hay una falla de seguridad” de “servidores públicos” que “son pagados por el pueblo de Colombia”.

El ministro de Defensa de Colombia, Pedro Sánchez Suárez, ofreció una recompensa de 3.000 millones de pesos (unos 729.000 dólares) por información que permita la captura de los responsables del atentado.