Octavos de final

Países Bajos aplastó 3-1 a Estados Unidos y avanza a cuartos de final

Se llama fútbol. La selección neerlandesa dio una lección en el campo de juego y se convirtió en el primer cuartofinalista tras vencer a Estados Unidos por 3 a 1, con goles de Memphis Depay, Daley Blind y Denzel Dumfries. Ahora, espera por el ganador de Argentina-Australia.

Países Bajos le ganó a Estados Unidos por 3 a 1 en el estadio Internacional Khalifa, por los octavos de final del Mundial de Qatar, y ahora esperará al vencedor de Argentina y Australia.

Los goles de Memphis Depay (10m.), Daley Blind (45m.) y Denzel Dumfries (36m. ST) le dieron la ventaja a los neerlandeses frente a un inocente rival, Estados Unidos, que será uno de los tres organizadores de la Copa del Mundo 2026 (con México y Canadá).

El descuento norteamericano lo marcó Haji Wright (31m. ST).

Países Bajos apeló al oficio de sus futbolistas y a la calidad individual para liquidarlo sin demasiadas complicaciones a lo largo del primer tiempo y aprovechó el complemento para la rotación de cara al futuro.

Países Bajos sigue en carrera, con la misión de romper el maleficio histórico de no ser campeón mundial, a pesar de las finales jugadas en 1974, 1978 y 2010.

Estados Unidos salió de entrada a “comerse” el partido, con muchos jugadores en ataque, rotaciones constantes en las posiciones y una sensación constante de dominio asfixiante para las últimas líneas de Países Bajos.

Tan sólo unos minutos tardó el conjunto estadounidense en poner de cara al gol a su figura, Christian Pulisic, que cada fin de semana es protagonista con Chelsea de Inglaterra, pero una reacción rápida del arquero neerlandés Andries Noppert evitó el 1 a 0 tempranero con una atajada al estilo handball, con piernas y brazos abiertos y su presencia de 2.03 metros en el achique.

El equipo de Louis van Gaal no negoció su origen, cuidó la pelota, y así surgió el primero de Depay, en una jugada que nació en los pies de Frenkie de Jong en el área chica propia, ensanchó la cancha y se puso en ventaja cuando todo era desfavorable.

A partir del nuevo escenario, Estados Unidos modificó la forma de buscar el gol -dejó atrás la verticalidad-, los espacios del inicio desaparecieron, los últimos 20 metros se volvieron una zona pantanosa como sucedió en la fase de grupos y le costó armar sociedades, al tiempo que Países Bajos esperó con paciencia para la velocidad de sus delanteros.

La juventud e inocencia de una selección como Estados Unidos, la segunda más baja en promedio de edad del Mundial (25 años y 2 meses), se notaron sobre todo en algunas fallas en defensa cuando salieron con pelota dominada. Es que sus defensores carecen de talento para meter pelotas entre líneas y al verse presionados cometieron errores que le generaron problemas en su propio arco.

Con la misma fórmula, Países Bajos: subida de Denzel Dumfries, centro atrás y aparición de Daley Blind para empujarla y darle tranquilidad del 2 a 0 al final del primer tiempo.